domingo, 1 de septiembre de 2019

Mucho más que tres puntos.

Atlético Huanguelén derrotó 1-0 a San Martín, en Carhué, y se mantiene en puestos de clasificación. Marcos Previsdomini, de cabeza, marcó el único gol del encuentro y el ganador terminó con diez hombres por la expulsión de Agustín Ferreyra.

Foto: Gentileza Facebook Club Atlético San Martín.

En Carhué obtuvo Atlético un triunfo de vital importancia en la pelea por un lugar en los cruces. Una de esas victorias cuya valoración excede largamente la de las tres unidades en juego. Por la condición de visitante (aunque el reducto santo no le es adverso al Aceitero), por la categoría del rival –candidato al título, ya clasificado a las semifinales anuales-, porque amortizó los dos puntos que dejó en el camino en Villa Belgrano, porque se afirmó en los puestos de clasificación (¡a un punto de los escoltas!) y porque se reencontró con su mejor versión, la que lo llevó a los primeros planos del Torneo Apertura.

Desde el inicio afrontó el protagonismo el dueño de casa. Con Galván y Martín Torres como mejores elementos, hizo circular la pelota y monopolizó la posesión. Atlético, por su parte, cedió la iniciativa y esperó refugiado en su campo, conformando un bloque compacto y minimizando el margen de error.

Así las cosas, una falencia individual o una pelota parada fueron las alternativas de San Martín para traducir la tenencia en situaciones de riesgo.

A los 7 Federico Bravo falló en la salida, propiciando el robo de Casas, que progresó unos metros y conectó con Torraco, y el remate de éste –desde la derecha- fue conjurado por Van der tuin.

A los 21 lo tuvo el propio Casas, de tiro libre, y su disparo encontró la resistencia del “uno” visitante que, volando sobre la base del caño izquierdo, envió la pelota al córner. Vino el tiro de esquina, también ejecutado por Casas, desde la derecha y peinó Martín Torres, a corta distancia, encontrando las respuestas a puro reflejo de Van der tuin para cachetear primero y de Cascallares para despejar en la línea luego. Aquel fue el pasaje en el cual mayores zozobras atravesaron los dirigidos por Damián Allen.

Cuando al fin supo salir del asedio el Aceitero se adelantó en el marcador y estableció la ventaja a la postre definitiva. Se disputaban 26 minutos cuando Ramiro Palacio, tras un primer intento fallido, insistió con un córner cerrado al primer palo que fue peinado por Marcos Previsdomini para poner la pelota lejos del alcance de Herrero y desatar la euforia del público visitante. Fue el cuarto gol de la temporada para el centrocampista que, así, firma su curso más efectivo en la máxima categoría.

Otro partido inició a partir de allí. Insistió San Martín, que adelantó sus líneas y ofrendó espacios. Los cuales fueron aprovechados por un Atlético que se animó más. Se armó un trámite de ida y vuelta y de ritmo vertiginoso, conformando un entretenido primer tiempo.

Tuvo chances el local para empatar. Un tiro libre de Franco Belleggia, a los 35 y desde la derecha, obligó a otra extraordinaria intervención de Van der tuin que, en espectacular volada y erigiéndose en figura, desvió el balón junto al travesaño. Y un minuto más tarde probó Torraco, ingresando por la derecha y con escaso ángulo, controlando nuevamente el cuidapalos visitante.

También las tuvo Atlético. Dos veces pudo estirar la ventaja Ramiro Palacio. A los 39 cuando no encontró resquicio para impulsar la pelota a un arco deshabitado ante la presión de González y del golero Herrero en su salida diez metros más allá de los límites del área mayor. Y treinta segundos más tarde tras hamacarse ante varios rivales por la derecha y elevar increíblemente su disparo.

Antes del descanso –a los 44- el local contó con una ocasión más: ingresando por la izquierda remató Torraco, incómodo y trabado por el providencial cierre de Federico Bravo, y su envío se marchó a un metro del poste derecho de Van der tuin.

Foto: Gentileza Facebook
Club Atlético San Martín.

Otra fue la historia de la segunda mitad. El trámite ya no volvió a ser el que era, unos y otros se debatieron con fiereza, prevaleció la paridad y el espectáculo se volvió deslucido.
Poco a poco Atlético comenzó a sentirse cómodo. Recuperó los rasgos distintivos del buen andar del Apertura y descansó en el infatigable despliegue de su mediocampo, que siempre puso una piedra en el camino de las intenciones santas y rindió a la altura de aquel primer torneo. También empezó a amigarse con el territorio antagonista.

A propósito, sobre 21 enfrentamientos en el “Carlos Laspiur” desde 1996 a la fecha santos y aceiteros se repartieron triunfos –ocho por lado- y dividieron honores en cinco oportunidades, amén de ser el escenario de dos gestas recordadas por el huanguelenense futbolero promedio: el 2-0 del 14 de julio de 2002 para obtener el Apertura y el derecho a disputar la final de la temporada –que le ganaría a Blanco y Negro- y el 4-0 del 30 de julio de 2017 por los Octavos de final del Apertura y en una de las performances más destacadas de los últimos veinte años.

Chocó una y otra vez, pero San Martín fue. Con más decisión que ideas, pero fue. Ingresó Cristian Torres para ser referencia de área –corriéndose Torraco a la banda-, empujaron Casas y Martín Torres, la pidió siempre Galván, pero no logró generar riesgo más allá de algún disparo de media distancia y de la andanada de centros que sorteó la firme defensa albiverde.

Aguantó estoicamente Atlético y apostó a las escapadas de Palacio y Eduardo Balvidares, ambos en buen nivel, para tomarse un respiro e intentar lastimar, aunque también pocas veces progresó con peligro. La más clara: una falta de Belleggia sobre el propio Palacio en la medialuna del área para enmendar un error propio y evitar una situación manifiesta de gol (el “9” quedaba mano a mano con Herrero) que Krieger penó con sólo una amarilla.

La expulsión de Agustín Ferreyra (otro destacado, por doble amonestación) le sumó nuevos capítulos a la resistencia aceitera. Se multiplicó Cascallares para sacar todo de arriba, se prodigaron Previsdomini y Hernández en el sudoroso despliegue, no escatimó esfuerzo el juvenil Arriaga para colaborar en el retroceso, continuó guapeando Palacio cuando quedó en soledad en la ofensiva (ingresó Rodrigo Guevara, para reforzar la medular, por un extenuado Eduardo Balvidares).

Un disparo de larga distancia de Galván a los 38, que se marchó apenas alto, y un intento de Mildemberg –ya situado como un delantero más- a los 45 que controló Van der tuin maquillaron el epílogo.

Tras cartón Atlético se abrazó a un triunfo vital para sus aspiraciones, que suma no sólo en la tabla, sino también en el –siempre fundamental- plano anímico y que lo acerca al objetivo primario de acceder a los cruces.


La síntesis.


SAN MARTÍN DE CARHUÉ 0 ATLÉTICO HUANGUELÉN 1.
Disputado en el Estadio “Carlos Laspiur” de Carhué, domingo 1/9/2019.

SAN MARTÍN DE CARHUÉ: Maximiliano Herrero (5) – Cristian Ferreira (6), Franco Andrés Belleggia (6), Lautaro Mildenberg (6) y Emiliano Santos (5) – Martín Torres (6), Pablo Matías Galván (7), Gianfranco González (5; 6mST Cristian Torres, 5) y Renato Jonathan Casas (6) – Juan Emilio Calzetta (5; 24mST Vladimiro Gómez, 5) y Guillermo Ezequiel Torraco (5). DT: Eduardo López.

ATLÉTICO HUANGUELÉN: Federico Carlos Van der tuin (8) – Emanuel Allen (6), Gustavo Rubén Cascallares (7), Federico Bravo (6) y Julio Ezequiel Hernández (7) – Nahuel Stamm (6), Marcos Ariel Previsdomini (8), Agustín Ferreyra (7) y Marcos Arriaga (7) – Ramiro Palacio (8) y Eduardo Andrés Balvidares (7; 41mST Rodrigo Guevara). DT: Alejandro Damián Allen.

GOL: 26mPT Marcos Ariel Previsdomini (AH) de cabeza.

EXPULSADO: 32mST Agustín Ferreyra (AH).

AMONESTADOS: Franco Andrés Belleggia, Lautaro Mildenberg, Emiliano Santos, Gianfranco González y Guillermo Ezequiel Torraco (SMCar), Federico Bravo, Agustín Ferreyra, Marcos Ariel Previsdomini y Eduardo Andrés Balvidares (AH).

ÁRBITRO: Alejandro Krieger (5).

RESERVA: San Martín de Carhué 3 (Diego Casas, Rodrigo Moreno y Francis Medina) Atlético Huanguelén 0.

No hay comentarios:

Publicar un comentario