Ramiro Palacio fue el goleador de 2018.

El delantero de Atlético Huanguelén, con 24 goles en 28 partidos, finalizó la temporada en lo más alto de la tabla de artilleros de Primera División según los medios especializados. Emiliano Aliberti, de Independiente, con 23 (no coincide con el registro de la Liga) y Gabriel Quintana, de Tiro Federal de Villa Belgrano, con 21 lo escoltaron.

Ramiro Palacio fue el máximo goleador de la temporada 2018 de la LRF que acaba de finalizar en el primer fin de semana de 2019 y que consagró, luego de veinticuatro años, como campeón a Racing Club de Carhué.

El delantero aceitero, con 24 conquistas en 28 encuentros disputados, terminó liderando la tabla de goleadores por primera vez en su carrera. Un logro individual que, recurrentemente, le resultó esquivo. Tres veces estuvo en el podio: sus también 24 tantos jugando por Empleados de Comercio en 2012 lo situaron por detrás de Diego Cuello (San Martín de Santa Trinidad, 29) y Gonzalo Lang (Independiente, 25); en 2013, ya en Atlético, igualó la línea de Nicolás Tracanelli (Tiro Federal de Puan) con 20 goles mientras Franco Pulgar (Automoto, 23) fue el máximo anotador; y en 2017 quedó a solo un grito de Gustavo Schilereff (23 festejos contra 24 del Pitu, entonces en Independiente).

En concordancia con el rendimiento de Atlético (firme protagonista hasta la décima fecha del Apertura y, a partir de allí, el equipo que menos puntos sumó en el resto de la temporada), Palacio cimentó sus números en el inicio del año futbolístico: marcó 16 goles en aquellas primeras diez jornadas.

Trece de sus conquistas fueron de pelota parada (gol olímpico a Independiente, sendos tiros libres a El Progreso y Blanco y Negro y efectividad del cien por ciento en los diez penales ejecutados), marcó ocho dobletes (Independiente –dos veces-, Tiro Federal de Villa Belgrano –dos-, Peñarol de Guaminí, Boca Juniors, El Progreso y Unión Pigüé) y un hat-trick (5-3 vs. Empleados de Comercio).

Además estableció varias marcas: superó el centenar de festejos con la camiseta albiverde (en la segunda fecha del Apertura), alcanzó los 150 goles en la Liga con un tiro libre extraordinario ante Blanco y Negro (por la octava fecha, un miércoles por la noche), igualó –en los cruces complementarios del Apertura- y superó –con sus dos goles a Tiro Federal de Villa Belgrano, durante el Clausura- a Leandro Allen como máximo goleador aceitero del último medio siglo  y con su doblete a Unión Pigüé firmó su temporada más efectiva en Atlético (un gol más que en 2017) e igualó aquellos 24 tantos que marcara en 2012 por Empleados de Comercio.

Quien lo escoltó, discrepancias mediante, fue Emiliano Aliberti con 23 tantos. El veloz delantero del Rojo de Pueblo San José tuvo su temporada de confirmación en la máxima categoría: revalidó todo lo bueno de años anteriores y le sumó eficacia en los últimos metros (marcó casi la misma cantidad que en sus cinco temporadas precedentes). De principio a fin fue el principal contrincante de Palacio en lo más alto de la tabla, con un denominador común: se destacaron en equipos de flojas campañas. Cabe señalar que el registro del periodismo regional no coincide con el de la Liga, que le otorga un tanto más. ¿El gol de la polémica? Un disparo desde la medialuna del área que buscaba el palo derecho y que tras desviarse en el cierre de Tobías Fernández descolocó a Raúl Donegani y se metió cerca del opuesto, en la victoria 4-2 ante Empleados de Comercio por la octava fecha del Apertura.

También fue el año del despegue de Gabriel Quintana y de Franco Gianfelici, quienes desde sus goles guiaron las ilusiones de Tiro Federal y Unión Pigüé. El goleador del equipo de Villa Belgrano fue la revelación de la temporada y pieza fundamental en la buena campaña de los dirigidos por Marcos Sauco. También fue la temporada más efectiva del centrocampista Alejandro Novgorosky, a la postre el goleador del Boca subcampeón.

Entre los foráneos Franco Pulgar y Esteban Angelini, ambos en su tercera temporada en la Liga, revalidaron sus pergaminos. El ex Liniers había marcado 23 –goleador de la temporada- en 2013 y 13 en 2016 jugando por Automoto, y marcó otros 13 este año defendiendo los colores de Club Sarmiento. El Topo anotó 11 en 2015 en Automoto, 20 la temporada pasada y otros 11 en 2018 por Unión de Tornquist. El tucumano Sebastián Luna, pese a no convertir en toda la etapa clasificatoria del Clausura, fue el goleador de un protagonista San Martín de Carhué.

¿El resto? Los de siempre: Gustavo Schilereff (el goleador de 2017 en su retorno a Deportivo Sarmiento terminó en el cuarto lugar con 18 tantos), Nicolás Tracanelli, Emilio Romero (goleador del campeón Racing, junto a Juan Perotti, con 11), Sebastián Graff y Rafael Balvidares (que extendió su marca sin precedentes: desde 2010 acumula ¡nueve temporadas consecutivas! de dos dígitos), nombres repetidos en tablas de temporadas pasadas.

Párrafo aparte y mención especial para Bernardo Galano, que marcó seis en el año y superó el centenar con la camiseta de Blanco y Negro, y para la vigencia del inoxidable Juan Manuel Ibarra (el pasado 2 de enero cumplió 46 años), que también convirtió seis jugando por Puan Foot-Ball Club y suma 329 en su historial liguista (12 de ellos en la Primera División “B” 1996). Entre los defensores Franco Belleggia (San Martín de Carhué), un otrora mediocampista ofensivo, y Maximiliano Diel (Deportivo Argentino), un especialista –suma 45 tantos en la Liga-, fueron los más efectivos con seis goles.

Los máximos goleadores de la temporada:

RAMIRO PALACIO (Atlético Huanguelén)………….……………….24

Emiliano Aliberti (Independiente)…………………….……………….23

Gabriel Quintana (Tiro Federal de Villa Belgrano)….………………21

Gustavo Schilereff (Deportivo Sarmiento)…………….……………..18

Franco Alexis Gianfelici (Unión Pigüé)………………….……………17

Alejandro Novgorosky (Boca Juniors)…………………….………….13

Franco Pulgar (Club Sarmiento)…………………………….………...13

Nicolás Tracanelli (Tiro Federal de Puan)………………….………...12

Esteban Alberto Angelini (Unión de Tornquist)…………….………...11

Rafael Balvidares (Blanco y Negro)…………………………………..11

Sebastián Graff (El Progreso)………………………………………….11

Sebastián Luna (San Martín de Cahué)………………………………11

Juan Perotti (Racing Club de Carhué)………………………………..11

Emilio Adolfo Romero (Racing Club de Carhué)…………………….11

Marcos Piedrabuena (Automoto de Tornquist)…………..………….10

Cristian Torres (Boca Juniors)………………………………..……….10

Joaquín Kraft (Blanco y Negro)………………………………..……….9

Tomás Monterubianessi (Peñarol de Pigüé)…………………..……...9

Facundo Villar (Automoto de Tornquist)………………………..……..9

Goleadores en actividad (*): Juan Manuel Ibarra (329 goles), Rafael Balvidares (175), Gustavo Schilereff (168), Ramiro Palacio (162), Diego Damián Cuello (138), Nicolás Tracanelli (128), Emilio Adolfo Romero (122), Bernardo Galano (103), Hernán Bilbao (98) y Sebastián Baratcabal (91).

(*) Se contabiliza solo a quienes disputaron partidos durante 2018.

Los Goleadores de las otras categorías oficiales de la LRF:

Reserva: Joaquín Alonso (San Martín de Carhué), 15 goles – Leonel Alonso (San Martín de Carhué), Marcelo Diel (Deportivo Argentino), Elián Fibiger (Atlético Huanguelén), Ezequiel Gómez (Peñarol de Pigüé) y Joel Pichiman (El Progreso), 14 goles – Julián Echaide (San Martín de Carhué) y Joel Oscar Sternari (Atlético Huanguelén), 13 goles.

Quinta División: Alejo Martínez (Racing Club de Carhué), 19 goles – Daniel Gómez (Peñarol de Pigüé) y Franco Meloni (Tiro Federal de Puan), 15 goles – Lucas Ortega (Boca Juniors), 13 goles – Nahuel Agustín Bardella (Racing Club de Carhué), Stefano Pisoli (Boca Juniors) y Lucas Zapata (Empleados de Comercio), 12 goles.

Sexta División: Bruno Cabrera (Racing Club de Carhué), 28 goles – Joaquín Mazzini (Boca Juniors), 24 goles – Ezequiel Gentili (Puan Foot-Ball Club), 22 goles – Gabriel Flores (Deportivo Argentino), 20 goles – Tomás Servian (Peñarol de Pigüé), 19 goles.

Séptima División: Fermín Millaci (Club Sarmiento “A”), 39 goles – Luka Olmedo (Empleados de Comercio), 35 goles – Dylan Aguado (Unión de Tornquist), 22 goles – Juan Detzel (Racing Club de Carhué), Tomás Entraigas (Peñarol de Pigüé), Diego López (San Martín de Carhué) y Santiago Skliar (Club Sarmiento “A”), 21 goles.

Octava División: Bautista Fernández (Atlético Huanguelén), 28 goles – Ivo Maier (El Progreso), 25 goles – Valentín Flores (San Martín de Santa Trinidad), 24 goles – Tiago Fuhr (Blanco y Negro) y Gerónimo Kugler (Automoto de Tornquist), 22 goles.

Los números del campeón.

El repaso estadístico de la campaña de Racing Club de Carhué, el campeón 2018 de la LRF. Los partidos, los goleadores y los números finales del título de la Estrellita, que festejó tras casi un cuarto de siglo. El recuerdo del campeonato de 1994, también con todos los detalles del camino a la gloria.

Veinticuatro años después Racing gritó campeón. Un logro que sumado a aquel tricampeonato en su ingreso a la Liga lo sitúa en el quinto escalón de los más ganadores de la historia: Club Sarmiento lidera con 24 títulos, lo siguen Blanco y Negro con 13, Deportivo Sarmiento y Peñarol de Pigüé con 8, Deportivo Argentino y la Estrellita con 4.

Protagonista tanto del Apertura como del Clausura, supo capear un bajón en el epílogo de cada etapa regular para obtener dos de los cuatro lugares en la definición anual y, por añadidura, el pasaje directo de la final. Con una marca registrada: su infalibilidad en los cruces mano a mano.

Tras liderar la Zona “B” del Apertura con tres puntos de ventaja con respecto a sus más inmediatos seguidores al término de la decimocuarta fecha (cuando goleó 6-1 a Puan Foot-Ball Club), finalizó en la tercera ubicación luego de cosechar solo tres de las últimas doce unidades en juego (tres empates, una derrota). Debió, entonces, transitar el camino largo de los cruces complementarios para obtener un lugar en la definición anual: eliminó por penales a Blanco y Negro, por la mínima diferencia a Club Sarmiento y también por penales se impuso a Peñarol de Pigüé en las Semifinales y a Unión de Tornquist en la final.

Similar fue la historia del Clausura. Nuevamente llegó en lo más alto de su Zona a las jornadas postreras: líder con un punto de ventaja sobre El Progreso tras la octava fecha (goleó 4-0 a Tiro Federal, en Puan), perdió los dos últimos partidos (ante Unión de Tornquist –finalmente primero- y Blanco y Negro) pero no el derecho a disputar las Semifinales de ganadores de zona tras culminar en el segundo lugar.

En el tramo final de la temporada fue letal: ganó los cuatro partidos (los dos de la definición del Clausura y las dos finales anuales), convirtiendo diez goles y sin tantos en contra. Derrotó 2-0 a Automoto en las Semifinales y 3-0 a Unión de Tornquist en la final del segundo torneo para ahorrarse una escala y dar el salto directo a la definición por el título. Con la misma autoridad transitó las finales: 3-0 en Coronel Suárez y 2-0 en Carhué, para no dejar dudas y para cortar con casi un cuarto de siglo de sinsabores.

Todos los partidos:

Torneo Apertura

3-2 vs. Tiro Federal de Puan (L)(Perotti, Bitschin y Acosta)

2-0 vs. Deportivo Argentino (L)(Romero de penal y Rapetti)

0-1 vs. Peñarol de Pigüé (V)

2-0 vs. Automoto (L)(Romero –dos, uno de penal-)

1-0 vs. Puan Foot-Ball Club (V)(Romero de penal)

0-1 vs. San Martín de Carhué (V)

2-1 vs. Unión Pigüé (L)(Floricich y Rapetti)

3-1 vs. Club Sarmiento (V)(Romero de penal, Cantoni y Bitschin)

0-1 vs. Unión de Tornquist (L)

1-0 vs. Tiro Federal de Puan (V)(Floricich)

1-1 vs. Deportivo Argentino (V)(Gustavo Benjamín Zapata)

3-1 vs. Peñarol de Pigüé (L)(Ferreyra, Romero de penal y Perotti)

1-2 vs. Automoto (V)(Floricich)

6-1 vs. Puan Foot-Ball Club (L)(Perotti -tres-, Cantoni, Camilo Puefil y Bardella)

1-1 vs. San Martín de Carhué (L)(Perotti)

0-1 vs. Unión Pigüé (V)

0-0 vs. Club Sarmiento (L)

1-1  vs. Unión de Tornquist (V)(Camilo Puefil)

Cruces complementarios del Torneo Apertura:

0-0 vs. Blanco y Negro(L)(Ganó 6-5 por penales)

1-0 vs. Club Sarmiento (L)(Matías Gálvez)

0-0  vs. Peñarol de Pigüé (N)(Ganó 5-4 por penales)

Final de los cruces complementarios del Torneo Apertura:

1-1 vs. Unión de Tornquist (N)(Rapetti)(Ganó 6-5 por penales)

Torneo Clausura:

0-2 vs. El Progreso (L)

4-1 vs. Boca Juniors (L)(Floricich, Perotti, Cantoni y Berdini)

0-1 vs. San Martín de Santa Trinidad (V)

2-0 vs. Deportivo Argentino (L)(Romero y Cantoni)

3-1 vs. Peñarol de Pigüé (V)(Camilo Puefil, Ferreyra y Lautaro Zapata)

5-1 vs. Empleados de Comercio (L)(Romero –dos, uno de penal-, Perotti, Ferreyra y Camilo Puefil)

1-1 vs. San Martín de Carhué (V)(Floricich)

4-0 vs. Tiro Federal de Puan (V)(Cantoni –dos-, Floricich y Romero)

0-1 vs. Unión de Tornquist (L)

0-1 vs. Blanco y Negro (V)

Semifinales del Torneo Clausura:

2-0 vs. Automoto de Tornquist (V)(Camilo Puefil y Rapetti)

Final del Torneo Clausura:

3-0 vs. Unión de Tornquist  (L)(Perotti –dos- y Rapetti)

Finales de la temporada:

3-0 vs. Boca Juniors (V)(Iriarte, Cantoni y Romero)

2-0 vs. Boca Juniors (L)(Perotti y Camilo Puefil)

Los números:

Partidos jugados: 36.

Ganados: 19. Empatados: 8. Perdidos: 9.

Puntos: 65. Eficacia: 60.2 %.

Goles a favor: 58. Goles en contra: 25.

Goleadores: Juan Perotti y Emilio Adolfo Romero (11 goles), Maximiliano Ezequiel Cantoni (7), Ignacio Andrés Floricich y Camilo Puefil (6), Facundo Albano Rapetti (5), Arístides Ferreyra (3), César Nahuel Bitschin (2), Alexis Javier Acosta, Nahuel Agustín Bardella, Hernán Berdini, Matías Gálvez, Leonel Iriarte, Gustavo Benjamín Zapata y Lautaro Zapata (uno).

Un poco de historia: el título de 1994.

Algo más de veinticuatro años debieron pasar para que Racing volviera a coronarse campeón de la LRF de Coronel Suárez. El último festejo databa del domingo 6 de noviembre de 1994 cuando la Estrellita derrotó, en el Parque “Felisa Igartúa de Alberdi”, a Blanco y Negro por 2-1 y se consagró campeón de dicha temporada.

Aquel fue el último eslabón de un exitoso ciclo que supo encadenar una serie de seis títulos consecutivos: 1989, 1990 y 1991 en el ámbito de la otrora Liga Carhuense de Fútbol; 1992, 1993 y 1994 apenas desembarcado en la LRF.

Por entonces el formato de la Liga constaba de dos partes y los ganadores de cada torneo definían el título anual. Un Clasificatorio de doce equipos, todos contra todos y a dos ruedas, y una Liguilla final de los seis mejores ubicados en el primer campeonato (a diferencia de 1992 y 1993, cuando la disputaron los primeros cuatro), con la misma modalidad de disputa.

El equipo dirigido por el Catalán Alberto Sebastián Jiménez no tuvo inconvenientes para adueñarse del Clasificatorio. En la última temporada en la que se otorgaban dos puntos al ganador de un partido, la Estrellita sacó siete de luz a sus perseguidores. Sobre 22 encuentros ganó 15, empató 5 y perdió solo dos, sumando 35 unidades. Lo siguieron San Martín de Carhué y Blanco y Negro (con 28), Club Sarmiento (27), El Progreso (26) y Peñarol de Pigüé (25), los restantes clasificados a la Liguilla.

En el reducido disputó la vanguardia fecha a fecha con Blanco y Negro, finalmente ganador. El equipo suarense alcanzó una diferencia de un punto en la primera jornada de las revanchas y la mantuvo hasta el epílogo. Terminó primero con 15 unidades (seis triunfos, tres empates, una derrota) y Racing segundo con 14 (seis triunfos, dos empates, dos caídas).

Cuatro veces se habían cruzado en el año (sendos triunfos de Racing en el Clasificatorio; un triunfo albinegro y una igualdad en la Liguilla) y volverían a estar frente a frente para definir al campeón.

La ida se disputó el miércoles 2 de noviembre, en Carhué, y venció el local con gol del artillero Carlos Alberto Sánchez. La revancha, cuatro días después en Coronel Suárez. Comenzó ganando Blanco y Negro, con gol de Diego Giest, y el elenco carhuense lo revirtió con dos inspiradas maniobras de Alberto Tito Bonsignore. Igualó con una chilena de ensueño y desniveló tras una jugada personal desde mitad de cancha que incluyó un último regate al arquero Armesto.

Como dato de color formaron parte de aquel título entre otros: Pablo Diego Cotarelo (en tres oportunidades como jugador y ahora también como entrenador participó de los cuatro títulos de Racing en la Liga), Juan Manuel Ibarra (aun en actividad, jugó la última temporada por Puan Foot-Ball Club), Franco Perotti y Néstor Puefil, cuyos hijos recogieron este domingo el testimonio de la dinastía ganadora.

En esa campaña de 1994 Racing ganó 23 partidos, empató 7 y perdió solo 4, con una eficacia del 77.9 % de puntos obtenidos sobre puntos en juego. Marcó 65 goles y le convirtieron apenas 22.

Carlos Alberto Sánchez, con 22 tantos, fue el máximo anotador del equipo y también de la Liga. Además, aportaron su cuota goleadora: Alberto Bonsignore, con 16; Juan Manuel Ibarra, 7; Franco Perotti, 5; Amilcar Balercia y José Maldonado, 4; Adrián Marfil, 2; Néstor Casas, Pablo Diego Cotarelo y Mauro Lavín, uno.

Tres jugadores tuvieron asistencia perfecta y disputaron los 34 partidos del año: Gustavo Walter Del Valle, Amilcar Balercia y Ernesto Iparraguirre.

Aquel tricampeonato continúa siendo el último de un equipo en la LRF. A lo largo de esos tres años la Estrellita disputó 100 encuentros, de los cuales ganó 61, empató 28 y perdió solo 11.

Racing de Carhué: un inobjetable campeón.

En la segunda final derrotó 2-0 a Boca y se consagró campeón luego de veinticuatro años y por cuarta vez en la historia de la Liga. Había vencido 3-0 en la ida, en Coronel Suárez. Juan Perotti y Camilo Puefil, uno en cada etapa, convirtieron los goles de la Estrellita que sufrió la expulsión de Leonel Iriarte en el comienzo del segundo tiempo.

Ganador de la final de los cruces complementarios del Apertura. Ganador de la final de zonas del Clausura. Por añadidura, al obtener dos de los cuatro pasajes disponibles a la definición anual, finalista directo de la temporada. El recorrido de Racing constaba entre los más destacados y regulares del ámbito liguista, incluyendo su invicto en cruces decisivos (superó seis, tres en los noventa minutos y otros tantos en la tanda de los penales). Y supo refrendarlo en las finales.

Ganó 3-0 como visitante. Ganó 2-0 en casa, con un hombre menos durante casi todo un tiempo. No dejó dudas. Y, aunque la diferencia en el global resultó algo exagerada, desde el funcionamiento colectivo y el peso específico y la jerarquía de sus individualidades se erigió en un campeón inobjetable.

Si en Coronel Suárez fue la tarde del sapiente Cantoni, la de este 6 de enero en Carhué fue la del todoterreno Floricich. El cinco fue el patrón del medio. Destacó por su ubicuidad para cubrir huecos ante un Boca más ambicioso que en la ida, fue la piedra angular del juego racinguista y se multiplicó cuando los suyos estuvieron en desventaja numérica.

Apoyado en Floricich, la Estrellita mostró un mayor volumen de juego desde el inicio y, aunque fue Boca quien contó con la primera chance clara, ya se había adelantado en el marcador antes del meridiano de la primera mitad.

A los 9 un tiro libre de Merquel estremeció el travesaño y no perdonó el local apenas se le ofrendaron licencias. A los 20, a la salida de un córner y en segunda jugada Juan Perotti tuvo el timing exacto para recortar su figura por sobre las de sus dos marcadores y esquinar un cabezazo medido para abrir la cuenta.

Lo buscó Boca, con Graff guapeándola en ofensiva como mejor exponente. Lo pudo liquidar Racing en el tramo final de la primera parte.

Lo tuvo Cantoni a los 34, ingresando al área, trastabillando entre agarrones y no llegando a puntear ante la salida de Emiliano Romero. También Iriarte a los 36, pero disparó a la posición del golero. Encontró un respiro la visita con un remate de Graff que pasó a centímetros del palo izquierdo a los 39, pero dos minutos más tarde nuevamente los dirigidos por Cotarelo coquetearon con el segundo: centro pasado desde la izquierda de Cantoni que Emilio Romero devuelve al medio de cabeza y que Puefil, con otro testazo, falla en posición inmejorable.

Salió con los bríos renovados Boca a la segunda mitad y la tempranera expulsión de Iriarte pareció envalentonarlo. Fue solo un espejismo. No tardó en volver al partido Racing. Al acostumbrado despliegue de Floricich y Lautaro Zapata se le sumó el sacrificio de Perotti (otra de las figuras de la final), importante en el retroceso y en la oferta de primer pase. Cerró caminos el local y no sufrió zozobras en defensa, solo un centro cruzado de Merquel desde la derecha al que Novgorosky no llegó por poco.

Bastó con que a los 20 Cantoni hiciese pie en el medio para que Racing lo liquidara. El talentoso mediocampista ganó un duelo individual y filtró una precisa habilitación a la izquierda para la incursión de Camilo Puefil que recortó y, con un disparo cruzado, le bajó el telón al partido.

Al Boca de Kessler, de meritoria campaña, ya no le alcanzó el empuje del incansable Matías Suppes –ya sin su socio de brega Steinbach, reemplazado por Rohvein-, ni que Merquel las pidiera todas, ni que Graff se debatiese con fiereza. Hasta hubo un disparo franco de Mauro Suppes a la posición del seguro Herrera cuando el cronómetro desde hacía ya un rato merodeaba la hora de los milagros.

Racing solo esperó la formalidad del pitazo final para soltar el grito de campeón que tuvo atragantado durante casi un cuarto de siglo, desde la tarde del 6 de diciembre de 1994 cuando en cancha de Blanco y Negro firmó el tricampeonato apenas desembarcado en la LRF.

La síntesis.

RACING CLUB DE CARHUÉ 2 BOCA JUNIORS 0.

Disputado en el Estadio “Hugo Alberto Robilotte” de Carhué, domingo 6/1/2019.

RACING CLUB DE CARHUÉ: Hernán Alberto Herrera – Lautaro Zapata, Lucas Gastón Gálvez, Jonathan Tello (46mST Rolando Navarro Silva) y Alexis Javier Acosta – Leonel Iriarte, Ignacio Andrés Floricich, Maximiliano Ezequiel Cantoni y Juan Perotti – Camilo Puefil (27mST Arístides Ferreyra) y Emilio Adolfo Romero (38mST Facundo Albano Rapetti). DT: Pablo Diego Cotarelo. Suplentes: Homero Giudici y Gustavo Benjamín Zapata.

BOCA JUNIORS: Emiliano Romero – Nicolás Suppes, Sebastián Zapatero, Mauro Suppes y Santiago Abad – Matías Suppes y Matías Steinbach (10mST Bruno Rohvein) – Alejandro Novgorosky (30mST Martín Gómez), Alexis Steinbach (23mST Kevin Aguirre) y Emanuel Merquel – Maximiliano Graff. DT: Rodrigo Kessler. Suplentes: Hernán Romeo y Gonzalo Vivas.

GOLES: 20mPT Juan Perotti (RCCar) de cabeza y 20mST Camilo Puefil (RCCar).

EXPULSADO: 9mST Leonel Iriarte (RCCar).

AMONESTADOS: Santiago Abad, Alexis Steinbach, Matías Steinbach, Matías Suppes, Bruno Rohvein y Mauro Suppes (BJ), Emilio Adolfo Romero (RCCar).

ÁRBITRO: Kevin Baliño.