Doscientas veces bajo los tres palos aceiteros.

Este domingo, en el vibrante 5-4 vs. Unión Pigüé, Federico Van der tuin cumplió 200 partidos defendiendo la valla de Atlético Huanguelén en la LRF. Es el arquero con más presencias y más penales atajados en el Verde en el último medio siglo.

En el “Humberto Petrelli” de Pigüé, donde Atlético Huanguelén derrotó en un final épico 5-4 a Unión, el golero Federico Carlos Van der tuin alcanzó los dos centenares de presencias defendiendo la divisa albiverde a lo largo de ocho temporadas.

Si bien tuvo participación en el Torneo Argentino “B” 2003, cuando ingresó en el último cuarto de hora en reemplazo de Gonzalo Arce en el empate 2-2 con Once Corazones de Indio Rico (goles de Martín Sansó y Néstor Ferreyra, para el Verde, y de Guillermo Sauce y Sandro Vega, para el representante de la Liga Tresarroyense), el debut del longilíneo cuidapalos (de 198 centímetros de estatura) en la LRF debió esperar hasta el inicio de la temporada 2006.

Nacido el 11 de agosto de 1986, con 19 años hizo su presentación oficial el 2 de abril en el empate 1-1 ante San Martín, en Carhué, por la primera fecha del Clasificatorio y en comienzo del ciclo de Raúl Antonio Maldonado como entrenador aceitero.

Aquella tarde Atlético alineó a: Federico Van der tuin; Facundo Romero, Gustavo Cascallares, Ramiro Coronel y Alejandro Van der tuin; Rafael Menchi, Néstor Ferreyra, Mario Leibold y Hernán Schinke; Renso Fibiger y Agustín Álvarez Maradona (también debutante). En la segunda mitad ingresaron: en el reinicio de las acciones Ramiro Palacio por Schinke, a los 11 minutos Pablo Franco (otro debut) por Menchi y a los 13 Juan Augusto Candia por Coronel.

La jornada inaugural no comenzó bien para Atlético, que a los 20 minutos se quedó con diez hombres por la expulsión de Alejandro Van der tuin y a los 24 se encontró en desventaja por el gol de un juvenil –de 16 años- Gustavo Emanuel Actis. Fue el primer tanto en la LRF del delantero que hoy se desempeña en el ascenso italiano, que se erigiría en un verdugo recurrente del Aceitero y que en aquel partido compartió alineación con el zaguero Gustavo Daniel Actis, su padre. El ingreso de Ramiro Palacio en el entretiempo le cambió la cara a Atlético y activó el empate, a los 8 minutos del complemento, desde una gran jugada personal y un centro picado a la cabeza del Churru Álvarez que, a la postre y en su única temporada en el Verde, sería el goleador anual del equipo con seis tantos en diecinueve encuentros.

El “uno” resultaría fundamental para sellar la igualdad, primero al tapar un cabezazo de Gabino Belleggia y luego, sobre el final y en espectacular volada, al desviar un bombazo de José María Machado que se metía junto al palo izquierdo.

Van der tuin fue el arquero de los 57 partidos que duró el ciclo de Maldonado como entrenador y sus actuaciones, en sintonía con el rendimiento del equipo, fueron mejores en 2006 que en 2007 (cuando promedió poco más de dos goles encajados por partido).

En 2008 emigró a Peñarol de Guaminí, donde permanecería dos temporadas. En la primera compartió plantel con Gustavo Walter Del Valle (otro ícono del arco aceitero y regional), en su doble función de jugador-entrenador, y en 2009 –ya como titular- alcanzó la final del Clausura (derrota 2-3 vs. Deportivo Argentino, que luego se consagraría campeón).

Tras un parate y cierto ostracismo, volvió a Atlético en 2012. Con Aníbal Aragón como DT inició como titular, aunque terminó compartiendo el arco con Gonzalo Bahl: disputó 22 encuentros y el ex arquero de Boca los restantes nueve.

A la inversa fue su participación en 2013, ya con Diego Menino como orientador. Comenzó el año como titular Mario Alberto Ullman (que defendió la valla aceitera en 18 oportunidades) y, tras un par de partidos en el Apertura, ya en el Clausura volvió al primer equipo sumando nueve presencias en el año. El juvenil Amadeo Scheffer jugó otros dos cotejos.

Guaminí nuevamente fue su destino en 2014, esta vez para ser –con buen suceso- el cuidapalos de Empleados de Comercio.

En 2015 y con Leandro Allen como entrenador, se produjo su último retorno a su tierra. Desde entonces no se perdió un solo partido de Atlético: con la de este domingo acumula 112 presencias consecutivas.

En 2016, con el desembarco de Javier Martínez al banco aceitero, cuajó su mejor año bajo los tres palos de Atlético: no le convirtieron en diez de los veintiocho partidos de la temporada, promedió menos de un gol recibido por encuentro (como no ocurría desde el título de 2002) y, desde una gran actuación, forzó los penales en el empate en cero con Deportivo Sarmiento por una de las Semifinales del Apertura, instancia en la que se impuso el Verdirrojo.

En la temporada precedente su rendimiento fue irregular en el Apertura, pero nuevamente resultó fundamental para avanzar en los cruces del Clausura: contuvo dos penales en la definición contra Boca y otros dos ante Deportivo Sarmiento para guiar a los suyos a la Semifinal vs. Unión de Tornquist, donde fue figura y atajó un nuevo envío en la tanda, aunque esta vez Atlético no fue efectivo en sus ejecuciones.

Una cualidad, su condición de especialista en los penales, que revalidó en el presente curso (atajó cuatro) aún cuando sufrió el bajón futbolístico del equipo y ostenta el segundo peor promedio de sus ocho temporadas con casi dos goles recibidos por encuentro.

Al listado de quiénes superaron los dos centenares, y que componen su hermano Alejandro, Gustavo Cascallares, Néstor Ferreyra, Gastón Martín, Ramiro Palacio, Gerardo Iribarne y Martín Sansó entre los contemporáneos, desde este domingo se suma Federico Van der tuin, amén de ser el hombre con más presencias y más penales atajados en el último medio siglo bajo los tres palos aceiteros.

Sus números como arquero de Atlético Huanguelén.

200 partidos disputados en la LRF. Es el arquero con más presencias en la Primera División de Atlético Huanguelén en el último medio siglo. Además, disputó un encuentro en el Torneo Argentino “B” 2003.

199 partidos inició como titular.

1 encuentro disputó ingresando desde el banco: reemplazó a los 28 minutos del segundo tiempo a Mario Alberto Ullman en el triunfo 4-1 vs. Peñarol de Guaminí en 2013.

311 goles le convirtieron en los dos centenares de cotejos disputados en Primera División.

1.55 goles recibidos por encuentro es su promedio bajo los tres palos aceiteros. Una marca similar, e incluso menor, a las de Félix Gabriel Fornes (1.73) y Julián Raúl Saad (1.58), los dos contemporáneos que lo siguen en cantidad de presencias.

0.93 goles recibidos por partido promedió en 2016, su mejor registro y la única vez que Atlético Huanguelén recibió menos de un gol por cotejo desde el título de 2002. Le marcaron 26 en 28 presencias.

44 veces no recibió goles, ergo mantuvo la valla invicta.

10 vallas invictas (sobre 28 encuentros) sumó en 2016.

9 penales contuvo en tiempo reglamentario: a Mariano Fogel (Independiente) y Sebastián Baratcabal (San Martín de Carhué) en 2006, a Héctor Fogel (San Martín de Carhué) en 2012, a Nicolás Cabral (Deportivo Argentino) en 2015, a Lucas Bollak (San Martín de Santa Trinidad) en 2017, a Gastón Gutiérrez y Franco Martínez (Tiro Federal de Villa Belgrano), Emiliano Aliberti (Independiente) y Braian Ruffa (Deportivo Sarmiento) en 2018. Es el arquero aceitero que más penales atajó en el último medio siglo.

6 penales atajó en definiciones: a Santiago Fernández (Deportivo Sarmiento) en 2016, a Darío Urroz y Guillermo Schroh (Boca Juniors), Matías Schroh y Francisco Schroh (Deportivo Sarmiento) y Juan José Heiland (Unión de Tornquist) en 2017.

112 partidos consecutivos acumula defendiendo la valla de Atlético Huanguelén. Desde la primera fecha de la temporada 2015 a la actualidad no faltó a ningún encuentro.

0 tarjetas rojas recibió en sus doscientos partidos en el arco aceitero.