Atlético avanza a paso firme.

Derrotó, en Santa Trinidad, a San Martín por 3-0 y enfrentará en las Semifinales de los cruces complementarios a Automoto. Gonzalo Kuhn, Eduardo Balvidares y Nahuel Stamm marcaron los goles. Ramiro Palacio marró un penal.

Foto: Gentileza Claudio Marcelo Meier - Nuevo Día.

Las imágenes postreras muestran a un equipo encerrado en el cuarto más retrasado de la cancha, resistiendo los embates de otro enceguecido, despejando de cabeza, revoleando alguna que otra pelota al cielo de los chambones. Signos inequívocos de una escuadra que sufre el cierre de un partido, sin embargo el marcador indica un lapidario tres a cero a favor de aquellos que defienden cada pelota como la última de sus vidas.

Atlético es efectivo antes que efectista. Desprecia las formas que tal o cual paladar desea imponer y se abraza a la prepotencia de los resultados. Se siente cómodo cediendo la iniciativa, en el plan del repliegue, de las líneas apretujadas, defendiendo espacios reducidos. Descansa en la basculación de un mediocampo que no escatima sudor y, cuando cierra caminos y obliga al envío frontal, en la firme respuesta de sus centrales.

Atlético es paciente. Atlético es práctico. Espera, agazapado, en su campo. Presiona allí y apuesta a que una le va a quedar. Con nervios de acero aguanta que lo atropellen, que lo acorralen, esperando ese momento. Luego, desplegado en ataque y más allá que sus delanteros no atraviesan su temporada más eficaz, ha recuperado esa mano pesada en los últimos metros que lo caracterizó en los años precedentes.

Atlético va. Con solidez, con sobriedad, con seriedad, con confianza. Convencido de su método, el que ha inculcado, en su tercer ciclo en la institución, Miguel Suárez. Y este domingo, en Santa Trinidad, volvió a evidenciar esas virtudes.

Sufrió en el comienzo con las incursiones de Enzo Martínez que encontró en el flanco derecho de la defensa aceitera terreno fértil para lastimar. El juvenil tuvo la primera del partido a los 7 minutos, ganando por aquel sector y despachando un disparo cruzado y apenas desviado.

Supo ajustar aquel desacople Atlético con el retroceso como ocho de Eduardo Balvidares, siempre generoso en el despliegue, cuando no tenía la pelota.

El propio mellizo avisó a los 16. Anticipó, de arremetida y en el primer palo, un desborde de su hermano Santiago por la derecha y el balón se estrelló en la base del caño izquierdo.

Un minuto más tarde llegó la apertura. Un enjundioso Gonzalo Kuhn progresó por la izquierda, conectó con Ramiro Palacio que le soltó una cesión exacta y, una vez en el área y ganada la posición, tuvo la frialdad para apuntar al tobillo diestro de Schwab y ajustar un delicado zurdazo rasante. Golazo.

Apenas superado el cuarto de hora Atlético ya se refugió en su campo y cedió la iniciativa. Esperó ordenado y redobló esfuerzos. Planchó el partido. San Martín tuvo la posesión, en sectores vacuos, y no encontró profundidad. Se apoyó en el pulcro manejo de Garay, Ferreyra y Graff, aunque lejos del área defendida por Van der tuin, se animó a conducir desde el fondo Gaab y, más allá de algún chispazo de Martínez, no logró lastimar.

El visitante esperó su chance y en el tiempo agregado –a los 47- la tuvo tras un error en la salida del golero Schwab: Palacio, en una tarde errática, falló lo que nunca falla y remató por encima del travesaño.

Foto: Gentileza Claudio Marcelo Meier - Nuevo Día.

En la segunda parte continuó machacando el local, aunque sin resultados. La visita se mostró firme en defensa y comenzó a alternar la altura de la presión, parándose un par de metros más arriba.

Lo tuvo San Martín a los 11, con un centro desde la derecha de Bollak que Pimentel no pudo conectar de pleno y que Van der tuin controló sobre la línea de sentencia. En la respuesta Atlético no perdonó.

A los 17 Stamm, que ingresó en un muy buen nivel por Santiago Balvidares, ganó sobre la izquierda y cruzó un pase exacto para la carrera de Eduardo Balvidares que, por el centro y emparejado con tres defensores, ganó la posición y definió cruzado y bajo, al palo derecho, ante la salida de Schwab.

El dueño de casa acarició el descuento con un disparo de Weinbender, a los 25, que estremeció el travesaño y la réplica aceitera, a los 29, fue letal. Premio a la tozudez de Nahuel Stamm que, tras una primera chance desaprovechada, peleó y ganó la pelota ante Schwab para vulnerar el cierre de un defensor.

De inmediato pudo llegar el cuarto cuando tras una clara falta de Fibiger a Ramiro Palacio, el juez Maximiliano González pitó el penal y el remate del propio “9” aceitero se estrelló en la base del palo derecho.

Empujó con sus últimos bríos San Martín, con Martínez y Bollak como símbolos. Aguantó Atlético en la firmísima tarea de Juan Cruz Balvidares y Gabriel Guevara, en las seguras respuestas de Van der tuin –dueño de todos los centros-, en el despliegue de su mediocampo –ya sin Kuhn, la figura, y con el debut de Álvaro Collins en una inusual función- y en el desparpajo y el coraje del ingresado Tomás Martín.

Pudo ser de Pimentel a los 39, pero su cabezazo –en inmejorable posición- se marchó alto. También de Scambelluri, en lucida maniobra a los 43, pero chocó con una gran respuesta de Van der tuin. Y también lo tuvo Bollak, a los 48, con un remate desde la derecha que dio en el palo diestro. Ni el tiro del final le salió al dueño de casa.

Un final que encontró a Atlético replegado, refugiado, como si se aferrara a una mínima ventaja. Un Atlético en su campo, en el plan que le sienta más cómodo y que más réditos le da. Un Atlético que cree, que avanza tras encadenar dos abultados resultados en cruces de eliminación directa –con todo lo que ello significa-, que no le incomoda ser visitante y que espera por Automoto, la próxima estación de la ilusión del pueblo albiverde.

La síntesis.

SAN MARTÍN DE SANTA TRINIDAD 0 ATLÉTICO HUANGUELÉN 3.

Disputado en el Estadio “Pedro Glock” de Pueblo Santa Trinidad, domingo 2/6/2019.

SAN MARTÍN DE SANTA TRINIDAD: Emiliano Schwab (5) – Lucas Bollak (6), Martín Franco (5; 19mST Kevin Gómez, 5), Jorge Benjamín Gaab (5) y Mirko Fibiger (5) – Marcelo Omar Weinbender (6), Braian Garay (6), Gonzalo Daniel Graff (5) y Miguel Ferreyra (5; 25mST Luciano Scambelluri, 5) – Enzo Martínez (7) y Pablo Rubén Pimentel (5). DT: Mario Alberto Ullman.

ATLÉTICO HUANGUELÉN: Federico Carlos Van der tuin (7) – Daniel Musso (6), Juan Cruz Balvidares (7), Gabriel Guevara (7) y Gustavo Rubén Cascallares (6) – Eduardo Andrés Balvidares (7; 27mST Tomás Martín), Agustín Ferreyra (6), Marcos Ariel Previsdomini (6) y Gonzalo Kuhn (7; 33mST Álvaro Collins) – Santiago Balvidares (6; 14mST Nahuel Stamm, 7) y Ramiro Palacio (6). DT: Miguel Ángel Suárez.

GOLES: 17mPT Gonzalo Kuhn (AH), 17mST Eduardo Andrés Balvidares (AH) y 29mST Nahuel Stamm (AH).

INCIDENCIA: a los 32mST Ramiro Palacio (AH) estrelló un penal en un palo.

AMONESTADOS: Braian Garay y Gonzalo Daniel Graff (SMST), Daniel Musso, Gustavo Rubén Cascallares, Gonzalo Kuhn, Agustín Ferreyra, Eduardo Andrés Balvidares y Nahuel Stamm (AH).

ÁRBITRO: Maximiliano González (6).