Por
la segunda fecha de Inferiores, Atl.Huanguelén derrotó a Tiro Federal de Puán
2-1 en Octava División y 5-1 en Séptima. Fue empate en Sexta, donde el Verde
tras estar dos veces cuatro goles abajo alcanzó un épico 5-5 en el último
minuto.
En una tarde a puro gol (19 tantos en tres cotejos),
Atl.Huanguelén –en su cancha- obtuvo un saldo altamente positivo producto de
dos victorias y un empate con ribetes de hazaña.
La jornada se inauguró con el cotejo correspondiente a
Octava División, donde el dueño de casa se impuso 2-1. Matías Allen (otra vez
desequilibrante) inauguró el marcador a los 21 minutos del primer tiempo y, ya
en el ocaso, Jalil Fibiger con un preciso tiro libre alargó diferencias a
los 24 minutos del complemento y Álvaro Torres descontó a los 25.
En Séptima División, el local goleó 5-1. Abrió el
marcador Tomás García a los 13 minutos del primer tiempo tras un
desborde y asistencia de Santiago Sommer, de excepcional etapa inicial. A los 5
del complemento llegó el 2-0 a través de Javier Jara quien con un magnífico
zurdazo “le puso el moño” a una jugada preparada a la salida de un tiro libre.
Un minuto más tarde descontó Matías Simon para el Tártaro y
cuando las cosas parecían complicárseles a las huestes de Allen-Palacio una
ráfaga de eficacia liquidó el pleito. A los 15 Tomás García firmó su
segundo tanto, a los 27 Germán Arroyo tras una incursión en
ataque y un derechazo de emboquillada marcó el cuarto y a los 30 Ian
Larreategui, de penal, estableció el marcador final.
El partido de Sexta División merecerá, por un buen
tiempo, un capítulo propio. El encuentro osciló entre el dominio absoluto de
Tiro Federal con sus remates misilísticos (alta eficacia en los disparos de
media distancia) y la recuperación anímica y futbolística de Atlético en el
último cuarto de hora. El Tártaro llegó a establecer en dos oportunidades una
diferencia de cuatro tantos (lo ganaba 4-0 y 5-1) gracias a tres goles de Cristian
Lang y dos de Nahuel Brest. Elián Fibiger había
achicado parcialmente a tres la diferencia a los 10 minutos del segundo tiempo
con un fuerte disparo, pero rápidamente Tiro estampó un 5-1 lapidario.
A partir
de allí comenzó a rodar el milagro. Los locales engordaron una hasta allí pobre
actuación y ganaron en profundidad y, principalmente, en confianza. En desmedro
de ello, la visita vio como se le escapaba la diferencia y sobraron los nervios
e inseguridades. Agustín Ferreyra, de penal, marcó el 2-5 a los 20 minutos. Maximiliano
Senterre, de cabeza, llevó el marcador a un 3-5 a los 25. Manuel
Alonso, recién ingresado, arremetió tras un centro atrás del propio
Senterre y achicó a sólo un gol la distancia a los 32. Y en el primer minuto
adicionado, a los 36, el propio Agustín Ferreyra con otro penal
estampó el 5-5 definitivo tras la enésima incursión de Elián Fibiger, tan símbolo
de la remontada como Senterre y el chispeante Marcos Cutu Arriaga, decisivos en ese cuarto de hora final con sabor a
proeza.
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